VALÈNCIA. Apenas quedan tres semanas para el pistoletazo de salida de la Gran Fira de València y una de sus citas previas, la presentación de su cartel, sigue sin haberse celebrado. Con la cuenta atrás en marcha para el evento y las actividades publicitándose, no solo no se ha presentado la campaña gráfica de 2025, sino que ni siquiera se ha anunciado el nombre del autor o estudio que la realizará, una demora extraordinaria que tiene su origen en el conflicto entre los profesionales del sector del diseño y el Ayuntamiento de València por las condiciones en las que se ha desarrollado el proceso de selección.
La publicación de la convocatoria dando por hecha la colaboración de las asociaciones -sin que fueran informadas previamente de ello- o la negativa a aceptar sus recomendaciones para la mejora de las bases tensó las relaciones entre la concejalía de Fiestas y Tradiciones, liderada por Mónica Gil (Vox), y la Asociación de Diseñadores de la Comunitat Valenciana (ADCV), la Asociación de Profesionales de la Ilustración Valenciana (APIV) y la Asociación de Empresas de Comunicación Publicitaria de la Comunitat Valenciana (ComunitAD), que durante la reunión de valoración leyeron un comunicado a modo de protesta.
Aunque en un primer momento se acordó que este documento fuera incluido en el acta de la reunión, finalmente desde el consistorio se frenó que estas críticas fueran reflejadas en el documento, por lo que las asociaciones profesionales se negaron a firmar el acta y, por tanto, manteniendo en pausa la conclusión del proceso a modo de protesta, un tira y afloja que, al menos en este caso, ahora se destensa.
Las asociaciones participantes han acordado finalmente firmar el acta “para evitar daño al estudio implicado” y con la intención de “retomar las conversaciones con el Ajuntament de cara a futuras llamadas a proyecto en las que se plantee la colaboración de las asociaciones profesionales”, explican desde la ADCV. “La ADCV mantiene la voluntad y compromiso de diálogo constante con las istraciones públicas que ha caracterizado sus 40 años de trayectoria y seguirá trabajando por y para el sector del diseño y sus profesionales”.
Con esta decisión se desbloquea el proceso de la campaña gráfica de la Gran Fira de València, aunque se mantienen las peticiones de “respeto al trabajo profesional” reflejadas en la carta firmadas por las asociaciones, en las que criticaban que se las convocó con tan solo un día de margen para la revisión de las candidaturas así como el hecho de que los del comité de selección no estuvieran remunerados, además del mencionado anuncio de su colaboración sin que fuera así.
El futuro de la relación entre unos y otros, con todo, está por ver. Por lo pronto, en el concurso para elegir cartel de Fallas, cuyas bases fueron aprobadas el pasado viernes, el Ayuntamiento eliminó la participación de las asociaciones sustituyéndolas por el Consell del Disseny del propio consistorio.