CASTELLÓ. Smartenergy Group, la firma inversora dedicada a energías renovables con sede en Suiza que impulsa la planta de generación de hidrógeno verde de 100 MW en Onda prevé el inicio de las obras en 2027 y su explotación en mayo de 2028. El proyecto recibió la resolución ambiental favorable (condicionada) en una resolución el pasado 28 de marzo y cuenta con una inversión prevista en 180 millones. Este miércoles, la compañía ha confirmado la obtención de la autorización ambiental integrada y ha manifestado que los consumidores industriales "ya han expresado su intención de adquirir el 75% de la producción de hidrógeno verde como sustituto de parte de su consumo de gas natural, principalmente mediante mezclas". "Este enfoque permitirá una transición gradual y reducirá significativamente las emisiones de CO₂ sin requerir grandes inversiones iniciales por parte de las empresas", han indicado en un comunicado.
El proyecto, con nombre Orange.Bat, pretende servir para producir hidrógeno verde para la industria cerámica de Castellón y está impulsado por un consorcio internacional. Las instalaciones se ubicarán en una parcela industrial de casi 12.000 metros cuadrados en el polígono industrial El Colomer, en Onda. La promotora cuenta con la compatibilidad urbanística de los terrenos desde abril de 2022 y no se presentaron alegaciones durante el plazo de exposición pública de la actuación. Según ha informado Smartenergy, la capacidad de producción anual de 16.446 toneladas de hidrógeno verde, que se distribuirán entre la industria local y la red troncal de hidrógeno de Enagás (Proyecto H2Med).
La firma de inversión Smartenergy ha explicado que Orange.bat "contribuirá a la descarbonización del sector cerámico español" y permitirá la "gestión sostenible de las actividades industriales y empresariales protegiendo los recursos naturales y la biodiversidad". Según la compañía suiza, el hidrógeno verde jugará un papel clave en los próximos años para la reducción de emisiones en industrias de alto consumo energético y difícil combustión. En el caso del sector cerámico español, muy concentrado en la provincia de Castellón, las ventajas adicionales incluyen una menor dependencia de los mercados energéticos externos y la posibilidad de operar con precios a largo plazo más predecibles y controlados.
Asimismo, han indicado que el proyecto cuenta con el apoyo de las dos principales asociaciones del cluster cerámico español: Ascer y Anffecc. En este sentido, han trasladado las palabras de representantes de ambas organizaciones. Para Alberto Echavarría, secretario general de Ascer: "La aprobación de la AAI para el proyecto Orange.bat supone un importante avance y acerca posibles alternativas al sector en su camino hacia la descarbonización". "En Ascer valoramos positivamente cualquier iniciativa energética que contribuya a la búsqueda de soluciones viables para la descarbonización del sector", ha apuntado.
Por su parte, Manuel Breva, secretario general de Anffecc, ha manifestado: "Es alentador ver cómo la istración agiliza los trámites para dar paso a proyectos que atraigan inversiones a la región y apoyen el camino hacia la descarbonización".
La firma impulsora del proyecto calcual que con la planta se evitarán 115.554 toneladas de CO₂ equivalente al año. Además, han apuntado que se espera que la planta genere 34 puestos de trabajo directos y 150 indirectos, además de los creados durante la fase de construcción. El proyecto, que reúne a Smartenergy y a los principales agentes industriales, empresas de inversión, centros de investigación y organismos institucionales, se ampliará a una capacidad de hasta 800 MWe en el futuro. La siguiente fase, ya en desarrollo activo, abarca un electrolizador de 80 MWe en Alcora.
Cabe recordar que la resolución ambiental exponía que la planta deberá adaptar su producción a la concesión de agua que tenga autorizada. Según recoge el texto, por el momento, la falta de disponibilidad de la totalidad de los recursos hídricos necesarios -se están tramitando los permisos ante la Confederación Hidrográfica del Júcar (CHJ)- solo permitiría operar de forma parcial y de forma proporcionada al volumen anual de agua sobre la que tenga derechos.