VALÈNCIA. La empresa valenciana Noku Mochi, especializada en la elaboración de mochis, ha reforzado su estrategia de expansión internacional con el foco puesto en Latinoamérica y los países árabes. Tras consolidar su presencia en España y Portugal, la compañía ha comenzado a trabajar con nuevos mercados como Ucrania, Georgia e Italia, al tiempo que prepara su entrada en México y otros destinos latinoamericanos.

Uno de los hitos más recientes en su proceso de internacionalización ha sido el inicio de la colaboración con Fozzy Group, uno de los mayores grupos empresariales de Ucrania, con fuerte implantación en el sector retail. El acuerdo se gestó tras la participación de Noku Mochi en la feria SIAL Paris en octubre de 2024. Fozzy Group opera, entre otras enseñas, Silpo Supermarkets, una cadena de supermercados reconocida por el diseño temático de sus tiendas y su posicionamiento como una de las más destacadas de Europa.

“Trabajar con Fozzy Group ha sido un paso muy importante en nuestra estrategia de exportación”, señala Pablo Davalillo, CEO de la empresa. Además de Ucrania, Noku Mochi ya comercializa sus productos en Georgia, a través de la cadena Europroduct, y en Italia, donde continúa ampliando su distribución. En el plano nacional, ha incrementado su presencia en cadenas como El Corte Inglés, Alcampo, Eroski, La Sirena, Consum, Hiperber y AhorraMás, con una estrategia basada en la ampliación de referencias y sabores.

La empresa cuenta con una planta de producción en el polígono Masía del Juez, en Torrent, que le ha permitido escalar su capacidad de fabricación. Las instalaciones, de 1.800 metros cuadrados, permiten producir hasta 120.000 mochis al día en un solo turno, frente a los 40.000 que se elaboraban anteriormente. Actualmente se fabrican alrededor de 80.000 unidades diarias, con el objetivo de alcanzar las 100.000 en los próximos meses.

El traslado a estas nuevas instalaciones se produjo en junio de 2024 tras constatar un aumento de la demanda, no solo en España, sino también en otros países europeos. La decisión se vio reforzada por las limitaciones del anterior centro de producción en Sedaví, que se había quedado pequeño para los planes de expansión de la empresa. "Era necesario dimensionar el proyecto", explica Davalillo. “El cambio se dio por suerte previo a las fuertes lluvias de la Dana, que podrían haber paralizado nuestra producción durante meses, debido a la dependencia de maquinaria específica procedente de China, que nos podría haber paralizado cinco meses", recuerda.

En cuanto al producto, con la ampliación, Noku Mochi ha lanzado nuevos sabores que incluyen fruta de la pasión, frutos rojos, yuzu con relleno de lemon pie o té matcha. Además, la empresa ha desarrollado un sistema de doble relleno y ha automatizado su proceso de envasado, con el objetivo de y optimizar su eficiencia operativa. Con una plantilla de 18 trabajadores, la empresa prevé cerrar el año con una facturación cercana a los 3,5 millones de euros. El crecimiento ha sido mayoritariamente orgánico, aunque desde la dirección no se descarta la incorporación de un socio industrial que aporte valor añadido al proceso de expansión. “Buscamos un socio que sume en términos de canales de venta y clientes, más que solo capital”, indica el CEO.

Respecto a los nuevos mercados, la empresa considera que Latinoamérica representa una oportunidad clave debido a la creciente penetración del mochi y a la falta de competidores consolidados. En cuanto a los países árabes, se valoran factores como la ausencia de estacionalidad y las condiciones climáticas favorables al consumo del producto. Por otro lado, el mercado europeo se continúa desarrollando, aunque con mayor cautela, debido a su madurez y a la presencia de fabricantes locales en países como Francia o Reino Unido. En cambio, el mercado estadounidense, aunque atractivo, se considera actualmente saturado.