VALÈNCIA. El Ayuntamiento de Paiporta ha aprobado, de forma definitiva, una modificación en su ordenanza fiscal que permite a los propietarios de inmuebles dañados por la Dana solicitar licencias de obra sin pagar la tasa municipal. La medida, que ya se ha publicado en el Boletín Oficial de la Provincia (BOP), entra en vigor este martes, siete meses después de la riada.
Según expone el documento del BOP, la exención se aplica con carácter retroactivo desde el pasado 29 de octubre, fecha en la que se produjo la Dana, y estará vigente para todas aquellas actuaciones que tengan como finalidad la reconstrucción o reparación de viviendas, locales o instalaciones afectadas. Para beneficiarse de esta ayuda, basta con que el solicitante indique que la intervención responde a los daños ocasionados por este temporal.
En otras circunstancias, la tasa por licencia urbanística puede alcanzar hasta el 1,6% del presupuesto de ejecución material del proyecto que se quiera acometer. Por tanto, la supresión de este importe representa un alivio económico directo para quienes aún lidian con los efectos de aquel devastador episodio de lluvias, que provocó inundaciones y daños estructurales en múltiples puntos de la provincia de Valencia.
Otras modificaciones urbanísticas en l'Horta Sud
Paiporta no es el único municipio de l'Horta Sud que ha adoptado medidas fiscales en respuesta a la catástrofe, como tampoco ha sido el primero. En noviembre, el Ayuntamiento de Alfafar aprobó la exención de tasas urbanísticas para las licencias de reparación o demolición en los inmuebles afectados. La medida entró en vigor en el mes de marzo, cuatro meses después de la Dana, tras superar los trámites istrativos necesarios.

- El barranco del Poyo en Paiporta seis meses después de la Dana. -
- Foto: MARGA FERRER/VP
Por su parte, el Ayuntamiento de Picanya ha optado por una estrategia distinta. El consistorio, que dirige el alcalde socialista, Josep Almenar, ha suspendido durante dos años las licencias de obra, edificación o cambio de uso en las calles Almassereta y Baixada Realenc, situadas junto al barranco del Poyo. En esta zona, el agua alcanzó cuatro metros de altura.
La decisión, adoptada con el objetivo de ordenar el planeamiento urbanístico en un entorno vulnerable, ha generado una fuerte oposición ciudadana. Los vecinos de Almassereta critican que no pueden iniciar la reconstrucción de sus viviendas al encontrarse en un "limbo legal": necesitan levantar fachadas e interiores, pero no se les permite tramitar las licencias necesarias mientras dure la suspensión.
Exención inmediata en Paiporta
A diferencia de estos casos, Paiporta ha optado por una fórmula más simple y de aplicación inmediata. La bonificación se concede desde este martes a cualquier vecino que acredite que su actuación responde a los daños ocasionados por la Dana.
Por el momento, no se exige ninguna documentación adicional. Sin embargo, el consistorio, que ahora dirige Vicent Císcar tras la baja temporal de la anterior alcaldesa, Maribel Albalat, podría solicitarla a posteriori para verificar el destino de la obra.
La medida se aprobó en el pleno municipal del pasado 27 de marzo y ha quedado ratificada al no presentarse alegaciones durante el periodo de exposición pública. En concreto, la exención cubre reformas, reconstrucciones, demoliciones, cambios de uso, intervenciones en elementos protegidos y otras actuaciones urbanísticas en el municipio.